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3 julio, 2024 - Lectura 3 minutos.
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Autolab / Consultas
Cuando te enfrentas a la decisión entre aceite sintético y convencional, es tentador optar por la opción más económica. Es cierto que el aceite sintético tiende a ser un poco más caro que el convencional. Sin embargo, ¿vale la pena gastar un poco más si el aceite sintético mejora el rendimiento del motor? La respuesta es un rotundo sí. Cambiar a aceite sintético puede ser una jugada inteligente. Sigue leyendo para descubrir por qué.
Cambiar a aceite sintético puede ser una decisión muy beneficiosa si tu motor está preparado para ello. El aceite sintético ofrece ventajas significativas debido a su capacidad para mantener un rendimiento estable en diversas condiciones. Es especialmente recomendable para motores modernos que utilizan tecnologías avanzadas como inyección directa, sincronización variable de válvulas, turbocompresores o sobrealimentadores, los cuales tienden a operar a temperaturas más elevadas.
El aceite sintético tiene una mejor resistencia a la descomposición térmica y a la oxidación comparado con el aceite convencional, lo que prolonga la vida útil del motor y reduce la formación de depósitos. Esto asegura una lubricación más eficiente y constante, crucial para mantener el rendimiento óptimo del motor a lo largo del tiempo.
Por ejemplo, en climas muy fríos, el aceite sintético fluye más fácilmente al arrancar el motor en comparación con el aceite convencional, reduciendo el desgaste del motor durante el arranque en frío. Además, su capacidad para soportar temperaturas extremas sin perder sus propiedades lubricantes lo hace ideal tanto para ambientes fríos como cálidos, proporcionando una protección consistente en todas las estaciones del año.
Desafortunadamente, existen varios mitos sobre cambiar de aceite convencional a aceite sintético que pueden confundir a los conductores. Es crucial desmitificar estas ideas erróneas para comprender los verdaderos beneficios del aceite sintético y cómo puede optimizar el rendimiento y la durabilidad de tu motor.
El siguiente paso después de entender por qué el aceite sintético puede ser superior al convencional es realizar el cambio correctamente. Es crucial hablar con tu técnico y revisar el manual del propietario antes de hacer la transición. No todos los aceites sintéticos son iguales y no todos los motores están diseñados para utilizarlos. En última instancia, el mejor aceite para tu vehículo es el que recomienda el fabricante, asegurando así un funcionamiento óptimo y prolongando la vida útil del motor.
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