Pagina de inicio ► Básicos
26 septiembre, 2023 - Lectura 3 minutos.
26 septiembre, 2023 - Lectura 3 minutos.
Autolab / Básicos
Cuando se trata de mantener nuestro automóvil en óptimas condiciones, la clave es la prevención. A menudo, como conductores, tendemos a preocuparnos solo cuando surge un problema evidente en nuestro vehículo.
Sin embargo, para mantener un rendimiento óptimo y una seguridad constante en la carretera, es fundamental prestar atención a tareas de mantenimiento preventivo, y el cambio del líquido de frenos es una de ellas.
El líquido de frenos es un componente vital del sistema de frenos de tu automóvil. Este líquido transmite la fuerza desde el pedal de freno hasta las ruedas, lo que permite detener el vehículo de manera segura y controlada. Además, actúa como un lubricante y evita la corrosión en el sistema de frenos.
Con el tiempo, el líquido de frenos puede absorber humedad del aire, lo que reduce su eficacia y puede llevar a problemas graves en el sistema de frenado, como la formación de burbujas de aire que afectan la capacidad de frenado. Por esta razón, es esencial cambiar el líquido de frenos de manera periódica.
Rol crítico del líquido de frenos
El líquido de frenos desempeña un papel crucial en el funcionamiento del sistema de frenado de tu automóvil. Es el medio a través del cual se transmite la presión ejercida en el pedal de freno hacia las bombas auxiliares en las ruedas. Sin este líquido, el sistema de frenos no puede funcionar correctamente y tu capacidad para detener el vehículo se verá comprometida.
Dado que el sistema de frenos está expuesto a un alto esfuerzo y temperaturas extremas, es esencial realizar revisiones periódicas. Cualquier fuga en las tuberías, pistones de la mordaza (caliper) o bombas auxiliares podría provocar una pérdida repentina de la capacidad de frenado, lo que podría resultar en situaciones de alto riesgo en la carretera.
La propiedad higroscópica del líquido de frenos
Una característica crítica del líquido de frenos es su capacidad para absorber humedad, una propiedad conocida como higroscopía. Muchas partes del sistema de frenos están compuestas de metal y están expuestas a cambios de temperatura.
Esto puede llevar a la formación de pequeñas partículas de agua debido a la condensación. Estas partículas pueden provocar corrosión y dañar las bombas principales, auxiliares, tuberías y pistones en la mordaza de freno, lo que eventualmente podría resultar en un fallo del sistema de frenos.
Aquí es donde entra en juego la propiedad del líquido de frenos de absorber esta humedad, evitando que se acumule en áreas críticas del sistema y disolviéndola en el propio líquido de frenos.
Dada la capacidad del líquido de frenos para absorber humedad, tiene una vida útil limitada. Por lo general, se recomienda cambiar el líquido de frenos cada uno o dos años, dependiendo de la calidad y el tipo de líquido utilizado.
Después de este período, las partículas corrosivas podrían comenzar a formarse dentro del sistema de frenos, lo que afectaría negativamente su rendimiento.
La frecuencia de cambio del líquido de frenos varía según el tipo de líquido utilizado y las recomendaciones del fabricante de tu vehículo. Sin embargo, una regla general es realizar el cambio cada dos años o cada 24,000 a 36,000 millas (unos 38,000 a 58,000 kilómetros).
Es importante mencionar que algunos fabricantes pueden tener intervalos de cambio específicos en el manual del propietario de tu vehículo, por lo que siempre es aconsejable seguir las recomendaciones del fabricante para mantener la garantía del vehículo y garantizar un rendimiento óptimo del sistema de frenos.
Además de seguir un programa de mantenimiento regular, es importante estar atento a las señales que indican que es hora de cambiar el líquido de frenos:
El mantenimiento preventivo es fundamental para mantener tu vehículo seguro y en condiciones óptimas de funcionamiento. El cambio regular del líquido de frenos es una parte esencial de este mantenimiento, ya que garantiza un sistema de frenos eficaz y confiable.
No esperes hasta que surja un problema evidente; en su lugar, sigue las recomendaciones del fabricante y cambia el líquido de frenos según el intervalo recomendado. Tu seguridad en la carretera depende de ello, y tu sistema de frenos te lo agradecerá con un rendimiento consistente y confiable en una variedad de situaciones.
Nuestra propuesta de valor es ayudarle a nuestros clientes a gestionar eficientemente el mantenimiento de sus vehículos.
Tipos de Unidades con las que trabajamos
Ligeros
Semi pesados
Pesados
Conoce nuestros servicio puerta a puerta, llevamos tú vehículo a nuestro taller especializado o el servicio a domicilio, donde reparamos tu vehículo en casa sin costo adicional.