Nuestro carro produce ciertos sonidos característicos que son parte de su funcionamiento normal.

Como ese ‘run run’ cuando arrancamos el motor o el zumbido cuando metemos la reversa, que se parece al de una cremallera cerrándose rápidamente.

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A pesar de todos los avances que se han generado en las transmisiones o cajas de cambio, nadie se ha preocupado por quitar ese ruido.

Aunque la verdad a pocas personas les resulta molesto y además nos avisa que por ahí viene un vehículo circulando en reversa.

Qué lo causa

La caja de cambios tiene sus complejidades, porque está compuesta de una serie de piñones de distintos tamaños que según la forma en que se combinan nos da las diferentes relaciones.

Cuando seleccionamos una marcha a través de la palanca se envían órdenes y se mueven los sincronizadores, que sirven para que los cambios engranen fácilmente entre sí.

Los piñones de los cambios hacia adelante son unas ruedas dentadas de tipo helicoidal, que quiere decir que sus dientes están en diagonal y al estar así angulados hace que estén constantemente en contacto unos con otros haciendo que su funcionamiento sea más suave y muy silencioso.

Pero para que funcionen perfectamente hay que añadir elementos como los sincronizadores para que no rasque al hacer el cambio.

Por otra parte, el piñón de la reversa tiene los dientes en forma recta, de manera que se entrelazan exactamente igual que los de una cremallera y generan sonidos característico, en este caso no son necesarios los sincronizadores.

La razón de la diferencia

La reversa es una relación diseñada únicamente para que las maniobras se realicen a baja velocidad y en un sentido completamente diferente al de las demás.

Es decir que el motor rota siempre en la misma dirección y para que circule hacia atrás hay que cambiar el giro de las ruedas mediante la piñonera.

Para invertir ese movimiento de la dirección se necesitan tres engranajes, si se utilizaran para la reversa los piñones helicoidales.

También tendrían que usar sincronizadores, lo que haría que todo el sistema fuera mucho más costoso.

Así que la razón por la que la reversa suena es una cuestión de ahorro, ya que los piñones rectos son más baratos de producir y no es necesario usar elementos accesorios.

Como es un cambio que se utiliza más esporádicamente y nadie va marcha atrás durante kilómetros, no vale la pena invertir demasiado dinero en ella.

Mucha gente ha debatido sobre la necesidad de desaparición de estos sonidos característico de la reversa.

Pero se ha defendido su función como sistema de alerta para peatones, pues es un sonido que permite identificar fácilmente a un vehículo que circula en sentido contrario.

Sin embargo, cuando los carros eléctricos y los híbridos sean populares por nuestras calles, ese sonido va a desaparecer.

Porque el motor eléctrico cambia su sentido de giro mediante la inversión de la polaridad.

Por: Adriana Gutiérrez