Cómo se hace un buen trabajo de latonería y pintura

Probablemente los trabajos de latonería y pintura sean algunos de los más solicitados en un taller, siempre tenemos pequeñas abolladuras y raspones por movernos entre un tráfico infernal en el que podemos llevarnos algún golpe.

Los trabajos de latonería y pintura son importantes tanto por mantener la estética como porque al momento de una reventa el estado exterior del vehículo puede influir de forma positiva o negativa en su valoración.

Para realizar un buen trabajo de latonería y pintura, hay algunos pasos que son imprescindibles, no importa si se trata de arreglar alguna pieza suelta o una reparación y barnizado total del vehículo.

Latonería

Antes de comenzar a realizar cualquier reparación de latonería y pintura, es necesaria una inspección conjunta entre cliente y taller, para evaluar el tipo de daños y entregar un presupuesto.

Sin importar el estado en el que llevemos nuestro carro, el siguiente paso debe ser siempre un lavado o limpieza de la zona que permita observar el estado y las imperfecciones de la chapa.

Luego se procederá a situar el vehículo en una zona iluminada y que permita al mecánico trabajar cómodamente para desmontar las piezas que sea necesario.

Después se desarmarán los elementos necesarios dependiendo de la zona afectada por el golpe, para poder repararlas con facilidad. Normalmente en este paso se desconecta la batería y se protegen todos los elementos que puedan mancharse.

El siguiente paso será proceder a reparar las abolladuras, teniendo en cuenta que cada una debe tratarse de manera particular, observando la trayectoria del golpe, la zona y la profundidad para usar los materiales y herramientas adecuadas.

Pintura

El siguiente paso en los trabajos de latonería y pintura será preparar el carro para aplicar el barniz, de manera que se debe lijar perfectamente la zona para que la pintura perdure y se adhiera con la máxima calidad.

El vehículo debe estar preferiblemente en una zona completamente limpia y aislada como una cabina, para evitar que las impurezas del ambiente se peguen en las áreas en las que se pintará.

Después se procede a empapelar y encintar todas las zonas en las que no debe caer pintura, como las ventanas o las luces.

Es ahora cuando llega el momento de pintar, un paso muy importante porque el aspecto final del vehículo depende de la calidad de las pinturas y las pistolas aerográficas, el entorno limpio, las capas que se le añadan y el barnizado final.

Si la pintura se realiza solamente en alguna pieza, se vuelve a armar el vehículo y se limpia, además se podrá pulir si se ha contemplado en el presupuesto inicial.

La latonería y pintura de un vehículo debe realizarse en las mejores condiciones de luminosidad y limpieza, usando productos de calidad y asegurándonos que el trabajo sea ejecutado por expertos, solamente así tendremos nuestro carro como nuevo.